
Es impresionante cómo el hecho noticioso que gira en torno a la selección nacional de Venezuela es superada por lo extradeportivo. Cuando hablamos de ella, al menos en los dos últimos años, pocas veces nos referimos rigurosamente a lo deportivo, lamentablemente.
La salida de José Peseiro de la dirección técnica de la Vinotinto y el nombramiento del interinato de Leo González desencadenó una ola de rumores y especulaciones que aún siguen latentes. Sin embargo, hubo algo que a mi modo de ver, ha hecho coincidir a todos: la convocatoria definitiva de cara a la triple fecha eliminatoria mundialista.
Para algunos desconocidos (evidentemente el que no sepa quién es Leo González no tiene la más mínima idea del fútbol venezolano), ha sido el trujillano el primer técnico en muchos años en convocar a dos laterales izquierdos naturales a la selección. Desde la época de Jorge “Zurdo” Rojas (terminó siendo volante), Jonay Hernández, José Luis Granados y los primeros años de Mikel Villanueva (actuaba como lateral izquierdo en Lara), en el combinado nacional no se tomaban en cuenta futbolistas de las características de Daniel Carrillo y Oscar González (Yohan Cumana fue llamado por Peseiro pero su perfil es más de carrilero siendo zurdo).

Ambos son futbolistas ampliamente conocidos por Leo González. Carrillo fue su lateral izquierdo durante su primera pasantía en Lara. Indiscutible titular, bajo la dirección técnica del trujillano se ganó ser el lateral zurdo con mayor continuidad en el campeonato venezolano y su buen hacer hizo que llamara la atención del balompié europeo. El KuPS de la primera finlandesa lo tiene como inamovible en su posición y ya ha jugado hasta quince partidos en la actual campaña finesa.
Oscar González es otro que ya estuvo bajo el mando de Leo González en el Deportivo La Guaira. El capitán del Monagas tiene rato tocando la puerta de la selección (estuvo en módulos de Rafael Dudamel y José Peseiro) y en el último proceso se perdió reforzar la emergencia de la selección en la Copa América de Brasil por un infortunado contagio de COVID-19 en el hotel de concentración de Caracas justo antes de viajar a Brasil.

Una característica le es común a ambos: son muy sólidos laterales en lo defensivo. Asumen los riesgos de pasar la banda pero pocos como ellos en el campeonato venezolano para regresar a una posición defensiva (quizá sea la diferencia con el ausente Daniel Linárez, el mejor habilitador de la liga en lo que va de campeonato).
La factibilidad de que alguno de ellos asuma la titularidad en la selección en alguno o todos los compromisos de la triple fecha eliminatoria contra Argentina, Perú y Paraguay es sumamente alta. “Para ser lateral izquierdo tienes que ser zurdo”, dijo alguna vez el actual seleccionador, quien a su llegada a Lara solo contaba con un solo lateral zurdo (Daniel Carrillo) y no dudó en subir del equipo sub 20 al jovencísimo Manuel Palma, el único lateral izquierdo que había en toda la estructura rojinegra. Además, que sean dos los futbolistas que han sido llamados para esa posición, invita a concluir que uno seguramente irá desde el vamos.
De buenas a primeras son solo especulaciones pero el hecho de contar ya con dos futbolistas en una posición que tantos quebraderos de cabeza han generado en muchos años a los distintos seleccionadores nacionales. Lo más curioso es que ha sido un técnico interino, venezolano, quizá sin tanto cartel, el que haya tomado la más firme decisión de contar con Carrillo y González.
A veces, lo que más complejo parece, también pudiera ser lo más sencillo. De momento, por la convocatoria armada, pareciera que Leo González lo tiene bastante claro.