
El campeonato nacional paró sus actividades en marzo, una vez decretado el Estado de Alarma en el país. Esto alteró la forma de entrenamiento del futbolista venezolano.
Los equipos se vieron obligados a cerrar sus lugares de trabajo y quedaron prohibidas las reuniones.
A pesar de la flexibilización decretada por el gobierno en el que el deporte entra, las sedes de los clubes no están autorizadas aún.
Los gimnasios privados también tuvieron que cerrar, aunque ya esta semana están abiertos al público, pero con varias limitaciones.
Ante esta realidad, los jugadores que ven acción en la Liga Futve tuvieron que buscar un lugar en casa para seguir sus entrenamientos.
Pero no fueron los únicos que tuvieron que ajustarse. Los preparadores físicos diseñaron sesiones de trabajo que se ajustaran a cada realidad.
Trabajos personalizados
Jorge Durán, asistente técnico de Richard Páez en Mineros y preparador físico, dio a conocer la pauta de ejercicios que cumplen los jugadores.
Señaló que hasta ahora en la cuarentena les ha enviado dos planes de trabajo diferente a cada jugador para que pueda ir variando su rutina.
“Los trabajos son de forma individualizada”, indica Durán y tiene sus razones, “hay jugadores que tienen bicicleta estática, otros algunas barras, algunos pequeños gimnasios, pero hay otros que no tienen nada”.
En el caso de los futbolistas que no cuentan con implementos se les indica ejercicios de fuerza en el que su cuerpo es el peso.
“Hacen flexiones, abdominales, ejercicios posturales”, indicó Durán, quien en los últimos años ha trabajado con Páez en los equipos que ha dirigido.
En el caso de Lala FC es el mismo. Su preparador físico, Pedro Rentería, especificó que dependiendo el equipamiento que tenga cada jugador se le hace llegar una rutina.
“También adaptamos los trabajos a los espacios pequeños partiendo que los van a hacer en su casa o apartamento”, sostuvo.
La sub-20 femenina espera la “nueva normalidad” para volver a entrenar
“Enviamos planificaciones para 4 días de la semana”, apuntó, además varían la intensidad. Tratan de controlar los bioritmos con las frecuencias cardíacas.
La intención es mantener la resistencia aeróbica, además de la fuerza, velocidad cíclica y flexibilidad.
Todo va supervisado por el entrenador Rubén Yori, quien se hizo a cargo del conjunto tras la salida de Del Valle Rojas antes de comenzar el torneo.
A los futbolistas se les hace llegar vía correo o WhatsApp los ejercicios y la rutina que deben seguir que es de mínimo 1 hora.
Les recomiendan que los hagan a diario para así mantener la forma física. “La idea es que mantengan el peso corporal, que no haya hipertrofia muscular, que haya cierta actividad motora”, expuso Durán.
“Confiamos en que nuestra jugadores cumplan con las asignaciones y al volver sea menor el trabajo en función de la intensidad”, dijo Rentería.
Las dificultades para el entrenamiento del futbolista venezolano
Por supuesto que este entrenamiento que los jugadores realizan en su casa no está ni cerca de la intensidad con la que se llevan a cabo en la cancha o cuando están bajo la supervisión del preparador físico.
“No es lo mismo, son otros patrones de movimiento”, dijo Durán. Además tampoco puede corregir al jugador en caso de que haga mal alguna postura.
“Hemos hecho reuniones con ellos por zoom para ver cómo están y el trabajo que realizan”, contó Durán.
A los jugadores de Lala les han pedido que cumplan un plan que tiene cinco pasos, reveló Rentería. Se trata de “nutrición, trabajo, nutrición, descanso y repetir”.
Poderse asegurar que lo cumplan es lo difícil, por ello tratan de tener constante contacto con ellos.
Incluso el cuerpo técnico se reúne de forma virtual para poder buscar estrategias y así puedan hacer un seguimiento.
Las indicaciones que les hacen llegar solo van en el tema físico. La parte táctica y movimientos en cancha quedan a un lado, ya que no hay forma de hacer el ejercicio práctico.
A ello se le debe agregar un tema, “no queremos llenar de información al jugador, ellos también están preocupados por lo que vaya a pasar por el torneo”, recalcó Durán.
Cerca de volver a la acción
Con la entrada del deporte a la flexibilización solo es cuestión de horas para que se dé a conocer el protocolo sanitario que hay que seguir.
Una vez que se tenga ello y los miembros de los equipos puedan someterse a pruebas de covid-19, los entrenamientos podrán volver.
Aunque todo se deberá hacer de forma progresiva, ya que debido al tiempo del parón tendrán que hacer una pretemporada, a la espera de que se designe una fecha para el regreso del fútbol venezolano.