Tiempo de juego efectivo. Intensidad. Aceleración. Desaceleración. La mayoría de esas cifras métricas permiten establecer comparaciones, de una u otra manera, entre los campeonatos, equipos y selecciones. Su determinación hoy día no depende de una variable humana, cuyo margen de error es más amplio que el de un aparato tecnológico.
La tecnología del seguimiento electrónico vinculada al rendimiento deportivo se ha instaurado con éxito en las más importantes ligas del mundo. Al inicio de la campaña, la directiva de la LIGAFUTVE anunció la adquisición de estos aparatos para los 16 equipos de la Primera División.
La marca australiana Catapult Sports, líder mundial en proveer tecnología para la medición deportiva, con clientes en las mejores ligas profesionales y universitarias del mundo, es la que suministrará la tecnología de medición por GPS. En alianza con Instat, empresa de análisis de rendimiento deportivo, el fútbol venezolano podrá contar con criterios estadísticos unificados, de cada uno de los equipos de la máxima categoría, generando información contextual en cada momento del juego y del entrenamiento al conectar los datos de sus atletas al video.
Ahora bien, ¿por qué le importa a la Liga adquirir toda esta tecnología para los equipos? Muy sencillo: los datos registrados de rendimiento individual y colectivo de nuestro fútbol no es el más alentador, mismo caso para el tiempo de juego efectivo de cada partido y algunos datos específicos, como el cambio de aceleración y la intensidad. No es necesario aclarar las penas que sufren los clubes criollos en el escenario internacional por estas marcadas diferencias. Es un interés para la Liga, que necesita mejorar su espectáculo. ¿Lo soluciona un GPS? No, pero deja claro y en cifras, hacia dónde se debe apuntar para mejorar.
Una muestra: los dos primeros partidos que marcaron el inicio de la jornada 2 de la LigaFUTVE 2022, fueron claro ejemplo de que hay muchas cosas que se deben mejorar, desde un GPS y desde la simple concientización y cambio de mentalidad. Dos partidos con interrupciones, futbolistas en el suelo, exageración de faltas, árbitros que interrumpen las acciones con decisiones demoradas y sin permitir la fluidez del juego, faltas en el aumento de la intensidad, escaramuzas, futbolistas discutiendo cada decisión arbitral. Ahí no hace falta tener un aparato tecnológico para darse cuenta que urge cambiar esa situación.
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Me consta que la premisa de los árbitros con escarapela FIFA es dejar jugar, fomentar el mayor tiempo de juego efectivo posible. Es un mandato CONMEBOL y de alguna manera, han transmitido esa idea al resto de árbitros en el país. Es por eso que las cifras de ritmo y tiempo de juego efectivo durante la Fase Final en 2021 fue mucho mayor que la Fase Regular.
Hay un mensaje necesario de transmitir sin necesidad de GPS: hay que mejorar el espectáculo y mucho depende del futbolista y el técnico ello. Aburre ver cómo un futbolista se tira al piso para perder tiempo deliberadamente, todo con el afán de no arriesgar en el marcador. En la Premier League, se sacrifica el resultado por espectáculo y es por ello que un equipo puede ganar por goleada como recibir una al siguiente partido, sin que nadie dude que estamos ante la mejor liga del mundo.
Es trabajo de todos los involucrados. Es por el bien del espectáculo. Mucho ayudarán los GPS para medir dónde debemos mejorar, pero si no existe una concientización colectiva en beneficio del negocio, no habrá aparato que sirva.
