
Eligio Restifo fue defensor en los 90 y actualmente trabaja como agente de futbolistas. Conoce el mercado como pocos y analizó para Idioma Futve la evolución del jugador venezolano.
Chile es uno de los destinos mejor valorados en los últimos años para los futbolistas criollos. Allí pone la lupa Restifo en su análisis.
“En los últimos años han llegado muchos jugadores venezolanos al fútbol chileno. Predomina el jugador ofensivo, de mitad de cancha para arriba. Richard Blanco, Emilio Rentería, ‘Cafú’ Arismendi, delanteros verticales, explosivos, potentes. Abrieron las puertas a los venezolanos”, señaló.
“Yeferson Soteldo y Rómulo Otero dejaron bien vistos a los jugadores venezolanos. Futbolistas explosivos. Eduard Bello dejó una buena imagen en Antofagasta. Jacobo Kouffaty tuvo un buen año con Iquique. Rafael Arace dejó buena impresión en Unión Española”.
“Por los buenos negocios que han surgido, los equipos chilenos están viendo jóvenes venezolanos y los esperan. Antes querían que tuvieran un rendimiento inmediato. Ahora los ven como inversión”.
Hay dos casos que marcan la diferencia, apunta Restifo.
“En su momento llegaron futbolistas establecidos, como Renny Vega y José Manuel Rey, que ya venían con una carrera en la selección. Pero ahora predomina mucho el futbolista joven”.
¿Cuál es la diferencia entre el mercado europeo y el sudamericano para un criollo?
“Al jugador venezolano se le hace más difícil ir a Europa. La adaptación es mucho más lenta, por la lejanía de la familia, el clima, la cultura, el idioma, la alimentación. Sudamérica le cae como anillo al dedo: mismo idioma, misma cultura”.
Eligio Restifo y la evolución del futbolista venezolano
En una línea de tiempo, Restifo establece comparaciones entre el jugador criollo de los 90 y principios del 2000 y el actual.
“El futbolista venezolano no había trabajado tanto en la parte física. Después de los preparadores físicos que llegaron desde Argentina, el venezolano se preparó más. Era una de nuestras falencias. Además de la técnica y la táctica, la parte física en un futbolista es esencial”, resalta.
“El venezolano ha aprendido y se ha dado cuenta con ejemplos que ir al exterior y triunfar da muchos beneficios en el presente y el futuro. El 90% de los jugadores realiza ese esfuerzo fuera de la cancha, como personas y profesionales”.
“En los 90 veías a un Stalin Rivas, Félix Hernández, con una técnica exquisita, pero sin buena preparación física. Imagínate tú el trabajo de Tomás Rincón de Zamora y Táchira al Hamburgo en Alemania. La transformación física fue espectacular. Lo ha logrado con tesón y trabajo”.
“En los 90, pocos jugadores se preparaban así”, afirma el agente. “Imagínate hoy un Stalin Rivas con un físico como Tomás. Hubiese llegado a ligas muy importantes”.
“No éramos flojos, sino que no trabajábamos bien. Los equipos no estaban capacitados. Llegaron los preparadores físicos argentinos e hicieron escuela”.
“Antes en las Libertadores teníamos derrotas duras. No quiere decir que hoy no haya algunas, pero el planteamiento táctico, técnico y físico es diferente. Hoy hay psicólogos, cambios en la tecnología, analistas de video, preparadores. El fútbol ha evolucionado, y al jugador venezolano le ha caído bien estas mejoras”.