El futbolista venezolano ante las nuevas demandas de FIFPRO

Atendí la invitación hecha por la Asociación de Futbolistas Profesionales de Venezuela a una conferencia vía Zoom a una conferencia en la que el presidente del sindicato mundial de futbolistas (FIFPRO), quien fuera futbolista profesional español, David Aganzo, expuso ante un panel de periodistas y otros miembros internacionales de esa Asociación, los resultados de un informe que, posiblemente, cambie el establishment de lo que actualmente conocemos como calendarios de fútbol.
El informe titulado Carga de trabajo de los jugadores y recuperación durante el calendario de emergencia, que fuera publicado a principios del mes de mayo, revela que algunos futbolistas, en una muestra de 265 de ellos de 43 ligas de las seis confederaciones, juegan hasta el 82% de sus partidos con menos de los cinco días de descanso recomendados, por lo que FIFPRO ha reclamado medidas inmediatas que garanticen pausas mínimas entre encuentros y entre temporadas.
Según el informe, en el denominado periodo de “emergencia” entre el 1 de mayo de 2020 y el 31 de enero de 2021, la media de partidos jugados con menos de cinco días de descanso se elevó al 42% en competiciones nacionales, un aumento del 10,7% en comparación con los datos anteriores a la pandemia.
Los más “afectados” son los futbolistas que juegan competiciones internacionales, para quienes la cantidad de encuentros en ese periodo crítico por la posibilidad de sufrir lesiones, subió hasta el 52%, una media de casi un 2%. El escaso margen de pausa entre temporadas es otro aspecto sobre el que alerta FIFPRO ya que el 23% de los jugadores tuvieron menos de dos semanas de paréntesis entre temporadas: Niklas Süle (Bayern de Múnich) y Kylian Mbappé (París Saint-Germain), respectivamente, tuvieron 11 y 13 días entre la final de la Liga de Campeones y el inicio de su competición doméstica.

Por Venezuela, participó en el foro de Zoom el internacional vinotinto Wilker Ángel, quien hace vida en el Göztepe turco y que durante cinco años vistió camisetas de clubes de Rusia. Wilker expuso su situación, en la que ha tenido que realizar viajes transcontinentales de hasta 13 horas para poder llegar a jugar un partido de la selección de Venezuela. “Es difícil rendir al 100% cuando llegas apenas 24 horas antes de un partido con tal carga de viaje. Eso no solo afecta tu rendimiento inmediato en el juego, sino esa carga acumulada va haciendo mella en tu condición física a largo plazo”.
Es decir, el hecho de que Luis Díaz se haya bajado del avión una madrugada en Portugal luego de jugar con Colombia en eliminatorias sudamericanas y haya disputado un partido con el Porto esa misma noche y le haya pegado un baile al Sporting, no quiere decir exclusivamente que es un futbolista fuera de serie en cuanto a físico se refiere: el riesgo a futuro por acumular cargas de ese tipo pueden disminuir su rendimiento más adelante.
A pesar del reconocido y plausible esfuerzo que han hecho los clubes venezolanos en competencias internacionales, donde absolutamente todos realizan sus traslados en vuelos tipo chárter, aún a nivel interno se ven casos en los que los traslados en buses por carretera superan las 12 horas de camino, lo que compromete seriamente el rendimiento del jugador y su salud.
Es un paso adelante para los futbolistas unidos que se atiendan sus demandas sobre las altas y desmedidas cargas a las que son sometidos, y se vislumbra en un futuro inmediato que sea obligatorio en adelante la presencia de una representación de los futbolistas unidos en la elaboración de los calendarios de competencias, tanto locales como internacionales, al tiempo que la voz de ellos deberá ser escuchada en la planificación de los viajes que realicen los equipos en cuanto a logística y tiempo de traslado.