Vinotinto: 9 puntos en los que José Pékerman debe enfocarse desde ya

Pasó la eliminatoria, una más. Qatar se une a la larga lista de intentos fallidos de estar en un Mundial. Sin embargo, el despecho que deja esta es muy amargo. Luego de competir y rozar lo imposible en tres premundiales seguidos (Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014), en las dos siguientes ediciones (Rusia 2018 y ésta) Venezuela terminó colista y desinflada.

Pasó de todo: brotes masivos de COVID-19, caos federativo, pleitos internos entre jugadores… y los resultados, que eran reflejo de lo que ocurría puertas adentro. Aparte, sin un proyecto de trabajo desde la inferiores que pudiera sostener o en este caso, auxiliar un barco que avisó desde la primera fecha, precisamente ante Colombia, que se estaba hundiendo.

La esperanza está en 2026. A José Pékerman y su aquilatado cuerpo técnico se le han entregado las llaves de la casa. Trabajar de arriba abajo, para reconstruir y retomar la ilusión. En Idioma Futve, al menos enfocándonos en la absoluta, hicimos una lista de nuevo puntos que requieren acción inmediata por parte de quienes gerencian la selección.

1-Unión y actitud del grupo

Es fundamental y quizá por eso ha habido un hermetismo absoluto alrededor de cualquier concentración de la Vinotinto. Pékerman toma a un equipo con la moral baja, dividido y con disputas que llegaron incluso a la opinión pública. El técnico tiene el deber de levantar la moral y credibilidad de la tropa y a partir de ahí, los jugadores deben sellar el compromiso de competir por un pasaje al próximo mundial

2-Ser garante

No le corresponde a Pekerman, pero, al ser la punta de lanza del proyecto federativo de Jorge Giménez, el argentino debe ser un buen vaso conductor en la relación entre jugadores y FVF. Fue muy desgastante para los futbolistas el proceso de “guerra interna” que había en la Federación que escaló incluso a una intervención de la FIFA. Antes, ya el grupo estaba irritado por la relación tirante entre el fallecido Jesús Berardinelli y Rafael Dudamel. Garantías como traslados con comodidades, buenas concentraciones y seriedad en el pago de premios seguramente ayudarán a mejorar el ambiente enrarecido del vestuario criollo.

3-Amistosos y módulos

La mitad de la selecciones de la zona Conmebol no tuvo amistosos durante el ciclo del premundial. Con la pandemia como impedimento (y excusa), Brasil, Argentina y Uruguay, por su talento propio quizás no la necesitaron. Paraguay y Venezuela, al parecer sí les hicieron falta. El resto, se apañó como pudo para tener compromisos y probar jugadores y estrategias. Venezuela, con jugadores en ligas importantes de Europa y con un técnico como Pékerman es rival más que apetecible para cualquier país mundialista. Se debe aprovechar la coyuntura de Qatar 2022 para tener amistosos de calidad. Por otra parte, aprovechar el tiempo con módulos de trabajo con jugadores del patio. Hizo falta mucho de este trabajo en la eliminatoria que acaba de terminar.

4-Profundizar proyectos aguas abajo

Pékerman y su CT tienen la llave de las selecciones masculinas. Es urgente que se reactiven los trabajos con los juveniles, que tuvieron casi nula actividad en 2020 y 2021. Primero, por la suspensión de los torneos Conmebol por la pandemia. Segundo, por los finales abruptos de los ciclos de José Hernández y Martín Carrillo. Ya se asomó en el horizonte la participación en el torneo Esperanzas de Toulon. Toca pisar el acelerador, pues, mientras en otros países de la región las formativas trabajaron y concentraron, aquí se congeló

5-Moldear sistema de juego

Pékerman probó tres dibujos tácticos en su arranque: 4-2-3-1, con el que goleó a Bolivia, repitió ante Uruguay y se dio cuenta que la defensa criolla necesita ajustes; 5-3-2 contra Argentina, que por buena parte del partido contuvo al rival, pero luego hizo aguas; y un 4-3-3 que tuvo muchas cosas interesantes ante Colombia. El argentino no es de casarse con un dibujo táctico, pero sí con un esquema que le sea efectivo. De esta manera, por lo visto, el equipo se construirá a partir de garantizar una buena defensa.

6- Mayor contundencia

La Eliminatoria a Qatar no solo fue la peor de Venezuela en el siglo XXI en cuanto a puntos (última, 10 unidades). También fue la más pobre en cuanto a goles anotados: 14. Camino a Brasil también se marcó esa cantidad, pero había dos juegos menos. El dato es demoledor si consideramos que Venezuela, tiene la segunda tasa de efectividad a gol (disparos a gol divididos entre goles marcados) de un 7,2% solo por encima de Paraguay (7,1%). Solo los guaraníes fueron peor que los criollos en goles marcados (12). Un ejemplo fue que por buen tramo de la eliminatoria, el goleador del equipo era Jhon Chancellor con dos goles. El referente en ataque, Salomón Rondón apenas jugó 6 de 18 partidos y terminó siendo goleador de Venezuela con cuatro dianas, tres en un hat trick marcado a Bolivia. Eric Ramírez y Josef Martínez marcaron una diana y Jan Hurtado, Sergio Córdova (Peseiro insistía en usarlo como nueve) y Fernando Aristeguieta, ninguna. Es importante potenciar a los delanteros del equipo y e ir incorporando algunos jóvenes como Jeriel de Sanctis, Saúl Guarirapa o José Riascos.

7-La pelota quieta

Es una materia aplazada desde que Juan Arango se marchó de la selección. El zurdo garantizaba goles de forma directa a red o buenos centros para que los rematadores tuvieran facilidades de concluir. De igual manera desde el córner. El “18” aun no consigue un reemplazante que siquiera se le acerque y por eso, Arango fue de suma importancia, ya que, al ser una vinotinto que priorizaba la defensa, generaba pocas ocasiones de gol y el balón parado era una herramienta al gol. Debe trabajarse más esa estrategia. Por contraparte pero en la misma materia, en las etapas de José Peseiro y Leonardo González la defensa sufrió goles y horrores con balones que venían de tiros libres y córners. En los cuatro partidos que tuvo Pékerman, no se concedieron goles de esa manera.

8-Afianzar la defensa

Una de las mejores actuaciones en una eliminatoria donde hay poco que rescatar es la de Nahuel Ferraresi. Por algo fue el tercer jugador con más partidos, detrás de Faríñez y Rincón. Tiene quite limpio y buena anticipación. A partir de él se debe construir la defensa. Ante Colombia, resultó ser buen central zurdo Christian Makoun, de buen presente en el Charlotte de la MLS. Los costados deben seguir siendo lugares seguros. Óscar González ha ganado rédito y con Pékerman se ha hecho notar cuando se coloca como un extremo adicional. Ronald Hernández desde hace rato viene trabajando como el gran reemplazo de Roberto Rosales, jugador que ya es legendario en la historia de la selección. Hay que mejorar los retrocesos y la colaboración que le debe prestar la primera línea de volantes.

9- El rol de Yangel

Capitán inobjetable de la Vinotinto sub 20 que fue segunda del mundo y con un gran liderazgo sobre los jóvenes. Un jugador realmente talentoso, sobre sus hombros cae la construcción de un modelo de juego que sea equilibrado y contundente. Ya no es proyecto, es realidad. Por lesiones, apenas jugó cinco juegos de la eliminatoria a Qatar. Es una pieza importante en el equilibrio del equipo y en la motivación del vestuario.