
“Regalamos un tiempo. No jugamos como correspondía este tipo de instancias”, soltó Oswaldo Vizcarrondo en la zona mixta para los micrófonos de Ruta Vinotinto y Mundo es un Balón, tras la eliminación de la Vinotinto sub-17 ante Corea del Norte, del Mundial de la categoría.
Con la autocrítica que lo caracteriza indicó que estos errores en un nivel élite se pagan caro y que nada tuvo que ver con el paradigma cultural que nombró ante Haití.

“No nos vamos con las manos vacías. Cuando estamos en período de formación esto es prolífico. Existe la frustración por tener una oportunidad de avanzar más lejos”, señaló.
El excentral destacó la suma de aprendizajes y emociones que no muchos jugadores suman a tan corta edad. En el aire quedará el “What if…” de un Henrry Díaz sano. Pero luego de Inglaterra no estuvo a plenitud, incluso cojeaba en los entrenamientos. ¿Errores? Sí, claro, pero el segundo tiempo deja la sensación de que este es el camino y que volvió a faltar ese colmillo a la hora de concretar las ocasiones.

Al otro lado del globo, la Vinotinto absoluta venció a Australia con Fernando Aristeguieta que soltó una gran frase: “Independientemente de quien siga en la selección, no puede ser una renovación de nombres o de refrescar el promedio de edad, sino de identidad. Del carácter del grupo”. Todo a través de una identidad de controlar el juego mediante el balón.
Previo al choque ante los “Canguros” comentó: “Va a llevar un tiempo, para que la gente vuelva a creer y la Vinotinto sea un medio para unir al venezolano en un objetivo común”.
Luego del Monumentalazo, que fue un Chernóbil futbolístico, estas propuestas del “Colorado” y Vizca son la muestra de que bajo de la tierra aún puede florecer algo que potencie a la Vinotinto con una identidad acorde sus características.
Te invitamos a seguir a Luis Vílchez en su cuenta de Instagram




